Gén 12:1 Pero el Señor había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré.
Gén 12:2 Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición.
Con estas palabras muchos en la actualidad (en especial los de la teologia de la prosperidad) quieren tergiversar la enseñanza que en las páginas del antiguo testamento vemos sobre el llamado de Dios a Abraham para hacer a traves de el una nacion de la cual años mas tarde vendria a nacer el Hijo de Dios.
Gén 13:2 Y Abram era riquísimo en ganado, en plata y en oro.
Abram era riquisimo como las escrituras lo afirman (aun antes de Dios llamarlo y hacerle la promesa)
Gén 13:16 Y haré tu descendencia como el polvo de la tierra; que si alguno puede contar el polvo de la tierra, también tu descendencia será contada.
Gén 13:17 Levántate, vé por la tierra a lo largo de ella y a su ancho; porque a ti la daré.
Dios no se estaba limitando a prometerle “bendiciones economicas”como muchos enseñan hoy,la gran promesa era hacer de Abraham una gran descendencia,una nacion de la cual vendria a nacer el Salvador del mundo.
La promesa estaba dirigida al plan de salvacion de Dios a los hombres,y no a cumplir caprichos de hombres (como se enseña hoy en dia).
Hoy se dice :”sacrifique como Abraham,ponga a prueba a Dios y El le dará el deseo de su corazon como lo hizo con Abraham” ¿ nota como tergiversan las escrituras? lo que Dios centraba en su voluntad,hoy lo centran en el deseo humano.
Vamos al capitulo 15 de genesis
(Gén 15:2-6) Y respondió Abram: Señor , ¿qué me darás, siendo así que ando sin hijo, y el mayordomo de mi casa es ese damasceno Eliezer?
Dijo también Abram: Mira que no me has dado prole, y he aquí que será mi heredero un esclavo nacido en mi casa.
Luego vino a él palabra del Señor, diciendo: No te heredará éste, sino un hijo tuyo será el que te heredará.
Y lo llevó fuera, y le dijo: Mira ahora los cielos, y cuenta las estrellas, si las puedes contar. Y le dijo: Así será tu descendencia.
Y creyó al Señor, y le fue contado por justicia.
HASTA AQUÍ ABRAHAM NO HABIA SACRIFICADO NINGUN HOLOCAUSTO,OFRENDA,ETC
La biblia dice que Abraham creyó al Señor, y le fue contado por justicia.
El nuevo testamento nos dará mas claridad al respecto.
(después lea con mas detalle todo el capitulo 4 del libro de Romanos)
Rom 4:3 Porque ¿qué dice la Escritura? Creyó Abraham a Dios, y le fue contado por justicia.
Rom 4:10 ¿Cómo, pues, le fue contada? ¿Estando en la circuncisión, o en la incircuncisión? No en la circuncisión, sino en la incircuncisión.
Rom 4:11 Y recibió la circuncisión como señal, como sello de la justicia de la fe que tuvo estando aún incircunciso; para que fuese padre de todos los creyentes no circuncidados, a fin de que también a ellos la fe les sea contada por justicia;
Rom 4:13 Porque no por la ley fue dada a Abraham o a su descendencia la promesa de que sería heredero del mundo, sino por la justicia de la fe.
Rom 4:14 Porque si los que son de la ley son los herederos, vana resulta la fe, y anulada la promesa.
Como vimos,Dios le hizo la promesa ANTES de la ley,para que no sea por cumplir requisitos de la ley la obtención de la promesas,y fue ANTES de haberse circuncidado,para que tampoco tengan que circuncidarse (ritualismo) los que reciban la promesas,sino SOLO a traves de la fe.
Rom 4:16 Por tanto, es por fe, para que sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme para toda su descendencia; no solamente para la que es de la ley, sino también para la que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros
Rom 4:22 por lo cual también su fe le fue contada por justicia.
Rom 4:23 Y no solamente con respecto a él se escribió que le fue contada,
Rom 4:24 sino también con respecto a nosotros a quienes ha de ser contada, esto es, a los que creemos en el que levantó de los muertos a Jesús, Señor nuestro,
Rom 4:25 el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación.
Ud hoy en dia con SOLO creer en el sacrificio de nuestro Señor Jesucristo,le es contado por justicia.
Gál_3:6-9 Así Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia.
Sabed, por tanto, que los que son de fe, éstos son hijos de Abraham.
Y la Escritura, previendo que Dios había de justificar por la fe a los gentiles, dio de antemano la buena nueva a Abraham, diciendo: En ti serán benditas todas las naciones.
De modo que los de la fe son bendecidos con el creyente Abraham.
Gál_3:14 para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu.
Gál_3:16 Ahora bien, a Abraham fueron hechas las promesas, y a su simiente. No dice: Y a las simientes, como si hablase de muchos, sino como de uno: Y a tu simiente, la cual es Cristo.
Gál_3:18 Porque si la herencia es por la ley, ya no es por la promesa; pero Dios la concedió a Abraham mediante la promesa.
Gál_3:29 Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos según la promesa.
OTRO PASAJE RELATIVO A ABRAHAM USAN LOS PROMOTORES DE LA TEOLOGIA DE LA PROSPERIDAD PARA LLEVARA A SUS SEGUIDORES A “SACRIFICAR DINERO”:
Stg 2:20-23 ¿Mas quieres saber, hombre vano, que la fe sin obras es muerta?
¿No fue justificado por las obras Abraham nuestro padre, cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar?
¿No ves que la fe actuó juntamente con sus obras, y que la fe se perfeccionó por las obras?
Y se cumplió la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia, y fue llamado amigo de Dios.
Este es un pasaje que debemos tomar en conjunto antes de estudiarlo por partes, porque se usa muy a menudo para demostrar que Santiago y Pablo no estaban de acuerdo. Se supone que Pablo hace hincapié en que somos salvos por la fe sola, y que las obras no cuentan para nada en el proceso salvífico. «Concluimos, pues, que el hombre es justificado por fe sin las obras de la ley» (Rom_3:28 ). «...sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo... por cuanto por las obras de la ley nadie será justificado» (Gal_2:16 ). A veces se afirma que Santiago, no sólo difiere de Pablo, sino que le contradice abiertamente. Esta, es una cuestión que debemos investigar.
Empezamos por advertir que el punto de vista de Santiago es el de todo el Nuevo Testamento en general. Juan el Bautista predicaba que la gente tenía que demostrar la autenticidad de su arrepentimiento con la excelencia de sus obras (Mat_3:8 ; Luc_3:8 ). Jesús predicaba que había que vivir de tal manera que el mundo viera las buenas obras de Sus seguidores y dar la gloria a Dios (Mat_5:16 ). Insistía en que a las personas se las conocía por sus frutos lo mismo que a los árboles, y que una fe que no se manifiesta nada más que de palabra nunca podría tomar el lugar de la que se expresa haciendo la voluntad de Dios
(Mat7:15-21).
Tampoco echamos de menos este énfasis en el mismo Pablo. Aparte de todo lo demás, pocos maestros habrá .habido que hayan hecho más hincapié que él en el efecto ético del Evangelio. Por muy doctrinales y teológicas que nos parezcan sus cartas, no dejan nunca de terminar con una sección en la que se insiste en las obras como la expresión de la fe cristiana. Aparte de esa su general costumbre, Pablo expresa repetidas veces la importancia que asigna a las obras como parte de la vida cristiana. Habla del Dios Que «pagará a cada uno conforme a sus obras» (Rom_2:6 ). Insiste en que «cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí» (Rom_14:12 ). Exhorta a todos a despojarse de las obras de las tinieblas y vestirse las armas de la luz (Rom_13:12 ). «Cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor» (1Co_3:8 ). «Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o malo» (2Co_5:10 ). El cristiano se ha despojado del viejo hombre con sus Hechos (Col_3:9 ).
El hecho de que el Cristianismo se tiene que demostrar con Hechos es una parte esencial de la fe cristiana según todo el Nuevo Testamento.
Pero el hecho es que Santiago sigue pareciendo como si no estuviera de acuerdo con Pablo; porque, a pesar de todo lo que ya hemos dicho, Pablo hace hincapié especialmente en la gracia y la fe, mientras que Santiago lo hace sobre la acción y las obras. Pero hay que decir una cosa: lo que Santiago ridiculiza no es el paulinismo, sino una perversión de él. La posición esencialmente paulina se contiene en la frase: «Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo» (Hech_16:31 ). Pero está claro que el sentido que adscribamos a esta demanda dependerá totalmente del que le demos a creer.
Hay dos maneras de creer.
Hay una manera de creer que es puramente intelectual. Por ejemplo: yo creo que el cuadrado .de la hipotenusa en un triángulo rectángulo es igual a la suma de los cuadrados de los dos catetos; y si se me 'exigiera, podría demostrarlo; pero no tiene la más mínima influencia en mi vida: lo acepto, pero no tiene ningún efecto en mí.
Y hay otra manera de creer. Yo creo que cinco y cinco suman diez y, por tanto, me niego a pagar más de diez pesos por dos caramelos que cuestan cinco cada uno. Llevo esa convicción; no sólo en la mente, sino a la vida y la acción.
A lo que Santiago se opone es a la clase de creencia que consiste en aceptar un hecho sin dejarle que tenga la más mínima influencia en nuestra vida. Los demonios también están convencidos intelectualmente de la existencia de Dios; de hecho, hasta tiemblan de miedo cuando piensan en Él; pero su creencia no los cambia en lo más mínimo. Para Pablo creer en Jesucristo quería decir llevar esa fe a cada porción de la vida, y vivir de acuerdo con ella.
Es fácil tergiversar el mensaje de Pablo y castrar la fe de todo su valor efectivo; pero no es realmente el mensaje de Pablo, sino una forma malentendida de las personas de él lo que Santiago ridiculiza. Condena la profesión sin la práctica, y con esa condenación Pablo habría estado totalmente de acuerdo.
Aun concediendo eso, aún se advierte una diferencia entre Santiago y Pablo: empezaron en diferentes momentos de la vida cristiana. Pablo empieza por el principio. Insiste en que nadie puede nunca ganarse el perdón de Dios. El primer paso es el que da la soberana gracia de Dios; una persona no puede hacer más que aceptar el perdón que Dios ofrece en Jesucristo.
Santiago empieza mucho más tarde, por el que ha hecho profesión de cristiano, por la persona que confiesa haber recibido ya el perdón y encontrarse en una nueva relación con Dios. Tal persona, dice Santiago con toda la razón, debe vivir una nueva vida, porque es una nueva criatura. Ha sido justificada; ahora debe demostrar que está santificada.
El hecho es que nadie se puede salvar por las obras; pero es igualmente cierto que nadie se puede salvar sin producir obras. Con mucho la mejor analogía es la de un gran amor humano. El que se sabe amado está seguro de que no ha podido merecer esa dicha; pero también está seguro de que debe pasar la vida tratando de ser digno de ese amor.
COMO NUESTRO SEÑOR NOS ENSEÑÓ: Mat 12:33 O haced el árbol bueno, y su fruto bueno, o haced el árbol malo, y su fruto malo; porque por el fruto se conoce el árbol.
La diferencia entre Santiago y Pablo depende de su punto de partida. Pablo empieza por el gran hecho básico del perdón de Dios que nadie puede merecer o ganar; Santiago empieza por el que es ya cristiano, e insiste en que debe demostrar que lo es en, sus obras. No somos salvos por hacer las obras; somos salvos para hacer las obras; estas son las verdades gemelas de la vida cristiana. Pablo insiste en la primera, y Santiago en la segunda. De hecho, no se contradicen, sino se complementan; y el mensaje de ambos es esencial a la fe cristiana en su forma más plena. «La fe salva sin obras; pero la fe que salva va siempre seguida de obras.»
Abraham es el gran ejemplo de la fe, pero patentizó su fe cuando estuvo. dispuesto -a sacrificar a su hijo único Isaac cuando entendió que Dios se lo demandaba, Si Abraham no hubiera tenido fe, no habría respondido a las llamadas de Dios, si Abraham no hubiera estado dispuesto a obedecer a Dios hasta lo último, su fe habría sido irreal.
Ninguna persona se sentirá nunca movida a la acción si no tiene fe; y su fe no será genuina a menos que la mueva a la acción. La fe y las obras son los dos lados de la moneda que representa nuestra experiencia de Dios.
PERO HOY DIOS NO LE PEDIRÁ A UD QUE SACRIFIQUE A SU HIJO O DINERO.
Mat 16:24 Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame.
Mat 16:25 Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará.
Los Sacrificios presentados en el pasado eran para remision de pecados(no para conquistas materiales,no eran un intercambio a cambio de favores).
Los sacrificios simbolizaban a Jesus
Heb 9:9 Lo cual es símbolo para el tiempo presente, según el cual se presentan ofrendas y sacrificios que no pueden hacer perfecto, en cuanto a la conciencia, al que practica ese culto,
Heb 9:10 ya que consiste sólo de comidas y bebidas, de diversas abluciones, y ordenanzas acerca de la carne, impuestas hasta el tiempo de reformar las cosas.
Heb 9:11 Pero estando ya presente Cristo, sumo sacerdote de los bienes venideros, por el más amplio y más perfecto tabernáculo, no hecho de manos, es decir, no de esta creación,
Heb 9:23 Fue, pues, necesario que las figuras de las cosas celestiales fuesen purificadas así; pero las cosas celestiales mismas, con mejores sacrificios que estos.
Heb 9:24 Porque no entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios;
Heb 9:25 y no para ofrecerse muchas veces, como entra el sumo sacerdote en el Lugar Santísimo cada año con sangre ajena.
Heb 9:26 De otra manera le hubiera sido necesario padecer muchas veces desde el principio del mundo; pero ahora, en la consumación de los siglos, se presentó una vez para siempre por el sacrificio de sí mismo para quitar de en medio el pecado.
Heb 9:28 así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan.
Heb 10:12 pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios,
Heb 10:14 porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados.
EL SACRIFICIO DE EL FUE PERFECTO NO HAY QUE AGREGARLE MAS NADA
Heb 10:18 Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado.
UD AL”SACRIFICAR”ESTÁ DICIENDO QUE EL SACRIFICIO DE EL NO FUE PERFECTO,Y QUE POR LO TANTO UD DEBE DARLE UNA MANO A DIOS HACIENDO SU PARTE.
(ud está pisoteando la sangre del Hijo de Dios)
Heb 10:28 El que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere irremisiblemente.
Heb 10:29 ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia?
UD NO TIENE QUE HACER ABSOLUTAMENTE NADA PARA RECIBIR ALGO DE DIOS (AL NO SER CREER) EL YA NOS DIÓ TODO:
Rom_8:32 El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?
DIOS NO INTERCAMBIA SUS BENDICIONES COMO SI FUERA UNA PROSTITUTA A CAMBIO DE DINERO
Hch 8:20 Tu dinero perezca contigo, porque has pensado que el don de Dios se obtiene con dinero.
JESUS NO ENSEÑÓ A SACRIFICAR DINERO PARA OBTENER LAS COSAS DE DIOS
Jua_15:7 Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.
Jua_14:13 Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.
Mat 7:7 Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.
Mat 7:8 Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.
Mat_21:22 Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis.
1 comentarios:
El pasaje de la viuda pobre visto en su contexto me ha dado liberación. Bendito sea el nombre de Yahshúah (Jesús).
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